Hace ya unos meses que se estrenó en cines, y más tarde en Netflix “La Sociedad de la Nieve”. Tras el montón de premios que ha ido recogiendo desde ese estreno, y ya a las puertas de los Oscars, con dos nominaciones, me gustaría compartir con vosotros, como ya compartí en redes sociales, el proceso de la pieza que realicé para la película.
Se trata de una reproducción de un colgante que perteneció a una de las víctimas del accidente, Susi Parrado. Ha sido un trabajo muy emocionante, por lo implícito de su historia. Estoy muy feliz con el resultado del trabajo. No pensé que se fuera a ver con detalle en pantalla y lo cierto es que me emocionó poder verlo en un par de escenas, con toda claridad, y también fotografiado en el libro sobre la producción de la película que se ha publicado.
Gracias, de nuevo, por esta oportunidad. Espero que os guste.
Partí de esta foto, que me pasaron de producción, del colgante original que tenia que reproducir.
El colgante pertenecía a Susana Parrado y está expuesto en el museo dedicado al suceso que hay en Montevideo, Uruguay. Busqué imágenes para poder saber el tamaño, pues no teníamos las medidas. A partir de un vídeo saqué las proporciones.
Usando una imagen como plantilla empecé a trabajar en una prueba, con las medidas ya acordadas.
Decidí hacer la reproducción en cera, falseando el trabajo de filigrana de hilo de plata y la piedra central, porque era menos laborioso, más rápido de hacer y podían realizar varias copias, necesarias, prácticamente iguales más fácilmente.
Tras darme el visto bueno a la prueba hice la pieza definitiva, la mandamos fundir en latón y saqué un molde para realizar varias copias, también en cera. Estas copias las repasé a mano para luego, mandarlas de nuevo a fundición y convertirlas también a latón.
Mientras las ceras del colgante se iban a fundición para convertirlas en latón, mediante microfusión, aprovechamos para hacer la reproducción de otras piezas. En este caso son unas insignias, estilo pin,para los pilotos del avión. Están hechas una a una.
Una vez de vuelta las piezas de latón, hubo que pulir y dar acabados a los detalles.
También estuvimos haciendo pruebas para encontrar la cadena perfecta.
El siguiente paso fue dar un baño de plata a las piezas de latón y una pátina de envejecido.
Luego, esmaltar en frío la lágrima central, imitando a la piedra original.
Aquí el resultado final.
Y aquí los tres ya montados con las cadenas.
Y este es el resultado final, comparado con el original.
Espero que os haya gustado el proceso.
Muchas gracias por acompañarme.
Gracias, de nuevo, a las personas que depositaron su confianza en mí y me brindaron esta oportunidad.
